Vale, es cierto, lo reconozco, no sé lo que quiero. ¿Pero sabéis qué? Yo soy feliz cuando un día lo que quiero es que llueva y se haga de noche, salir a pasear, y pensar en todo; y después al día siguiente lo que quiero es que haga mucho calor y mucho sol para jugar en la arena haciendo castillitos que luego se llevará el mar.
Unos días tengo ganas de salir con mis amigas de compras, ponerme de chucherías hasta que ya no pueda más, adueñarnos de cualquier cosa tonta y reírnos hasta que nos duela el estómago. Otros, lo que quiero es estar todo el día con mi chico, jugando sobre la cama, y que pasen las horas hablando con la mirada y besándonos hasta dejarnos marca.
Unas veces creo que mi futuro está en la música, descubriendo nuevos talentos y creciendo con ellos. Otras creo que viviré decorando casas y castillos de ensueño. O puede que lo haga viajando todos los días miles de kilómetros alrededor del mundo. Quizás no sea nada de esto y acabe siendo una chef de primera. O una novelista mediocre.
Algunos días lo que más más más me apetece es colgarme la guitarra e intentarla tocar, a los cinco minutos me enfado con ella y la vuelvo dejar donde estaba. Otra cosa que me apasiona son los bocadillos de nocilla en pan bimbo, toda una delicia que he llegao a estar años sin comer por mis queridos complejos. Cuando tengo un móvil viejo escacharrao entero, quiero uno nuevo con una cámara de 74 Mpx, wi-fi, 120Gb de memoria, unos altavoces que se oiga la música en 2Km... y cuando lo tengo, me da miedo sacarle a la calle y vuelvo a utilizar mi querido movil viejo.
A veces llego a tener obsesión por el orden y la limpieza, todo tiene que estar en su sitio, ni una mota de polvo, ni una miga por ahí, toda la ropa en el armario y ordenada por preferencia tardedecañas/dediario/deandarporcasa/ropainterior. Otras veces mi casa parece una leonera donde no se sabe dónde está nada, ni desde cuándo.
Aunque ahora que lo pienso, hay una cosa en la que nunca cambio de opinión. Mi música siempre ha sido la misma (o parecida, voy evolucionando...). Mis chicos de El Canto Del Loco siempre han adornado mis estanterías y han sonado bien alto en mis minicadenas. También los Despistaos han estado muy presentes en mis oídos, y La Fuga (y ahora Rulo), y mis Días extraños/Algunos Hombres Buenos... en definitiva, los que me llegan adentro.
En definitiva, como véis, mi vida es un poco caótica, incluso alguen dice que bipolar, pero a mí me gusta, uno de mis mil defectos... o virtud.
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17.11.2010: Quiero rodearte, dejar la duda a parte, darte trozos de este corazón. Y comerte la boca toda la noche...
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